La semana pasada, tal como pudisteis constatar, no hubo "lunes a la lluvia". Nada tuvo que ver con el cansancio o... sí. Disfruté de un maravilloso lunes ―y resto de la semana― al sol del trópico, descansando de la mucha lluvia de este invierno. Con las pilas recargadas y la fotosíntesis hecha, toca una nueva entrada. Esta vez, una poesía breve llamada: "La niña y el reloj":
La niña y el reloj
Unas lágrimas desde el suelo,
los gritos y el estupor.
Una mirada de hielo,
el ruido estremecedor
Las risas se detuvieron ,
el reloj se quebró.
Los juegos se interrumpieron,
una niña sola se quedó.
Observó su miedo:
un sollozo, una llamada.
Escuchó el silencio,
un llanto en la nada
La niña murió,
siendo adulta despertó.
El reloj volvió a girar,
pero ya no pudo olvidar.
Pues se te echó en falta. Hiciste bien en descansar y tomar energía de los rayos del sol. Y el mes de mayo no está siendo malo... Bonito poema Sandra.
ResponderEliminarMuchas gracias, Iñigo. Que conste que tienes razón, por aquí ya empieza a asomar Lorenzo.
EliminarCierto, se te echó de menos la semana pasada. Respecto a la entrada de hoy, yo creo que sería genial como letra de una canción. :)
ResponderEliminarJajaja, es curioso porque cuando hacía mis pinillos con la guitarra (hace poco de eso), a este poema le puse música... Pero aunque la composición me gustara, lo de cantar no es lo mío XD.
EliminarSandra,
ResponderEliminarQue beleza de poema, muito bem construído e escrito
Agradeço também o comentário que deixou no meu Blog
Votos de ótimo dia
Muchas gracias, Susana, por tus palabras. Fue un placer leerte.
EliminarLa niñez es unos de esos momentos mágicos de nuestra vida que nos damos cuenta de su importante cuando ha pasado. Estupendo poema Sandra.
ResponderEliminarEstoy realizando un podcast sobre cultura y me gustaría recitarlo haciendo referencia a tú página si me lo permites.
Un saludo.
Claro que sí, Ufinder y espero que me pases el link de tu podcast para escucharlo ;)
EliminarLa niña murió... me gusto eso refleja que la vida no se refleja en tiempo sino en experiencia
ResponderEliminarDesde luego! Gracias por pasarte, Noruego.
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